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Junto al túnel de la Vía Verde

Como hace dos años hicimos la excursión a la Vía Verde saliendo de Benicàssim, hace unos días quisimos volver a dicha vía, pero empezando desde Orpesa. Si en la primera salida comimos de pícnic, en esta última lo hicimos en el restaurante Mendiola de la Playa de la Concha.

Por culpa de la lluvia y de las obras, hubo que aplazar varias fechas.

El Equipo del Blog

“El día que fui yo hacía frío y, como había llovido, al pasar por el túnel caían gotas. Me lo pasé muy bien. La comida en el Mendiola fue muy buena y abundante” (Dori Torreblanca).

“Yo fui el día 17 de marzo: lo que más me gustó fue el paseo por el túnel. Me emocionó ver la luz al final También disfruté mucho del restaurante. Me pusieron un plato lleno de mejillones. Estaban buenísimos” (Emilio Martínez).

“Un paseo entretenido, divertido y con un tiempo inmejorable. Impresionan los 600 metros del túnel con una pequeña iluminación. El restaurante estuvo muy bien” (Santos Cuadros).

“Yo me lo pasé muy bien. En un principio, mi grupo iba el 18 de marzo, pero ese día llovió. Al final, fui el último día (24 de abril), que salió muy soleado. Me gustó mucho el paisaje de la Vía Verde, entre el mar y la montaña. Además, comimos de maravilla” (Miguel Andrés).

“El día de la Vía Verde me gustó mucho compartirlo con mis compañeros del Maset. Vimos todos los tramos desde el inicio en Orpesa hasta la Torre de la Corda (cerca de la Renegà). Luego volvimos hacia el restaurante, frente a la Playa de la Concha, cerca del chalé de los Berlanga. Recordé mi juventud cuando la familia Berlanga veraneaba allí. Fue un día completo” (Víctor Valls).

“Me encantó la excursión. Saqué muchas fotos de la Vía Verde para mi madre. Mi primer día se suspendió por la lluvia, pero tuve suerte el segundo porque hacía mucho sol. Lo mejor fueron los mejillones, las patatas fritas y el café del restaurante” (Verónica Robles).   

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